Excelente nota al que nos robo una alegria

El dominicano Mercedes, árbitro de la final de Indianápolis 2002 que perdió Argentina, dice que no falló, pero se lo siguen reprochando.

Reynaldo Mercedes no es una cara más en el torneo. El juez dominicano es aquel que, junto a su compañero Nikos Pitsilkas, se equivocó en el cierre de la final ante Yugoslavia y cuyos errores significaron perder el título del mundo en Indianápolis 2002. Aquel dolor no cesa en los hinchas argentinos pese a que el jueves se cumplirán nueve años del suceso. Mercedes, de buena carrera, recuerda aquel día como “el partido más importante que dirigí en mi vida” pero se niega a hacerse cargo de los errores.

Quizá por eso Olé tuvo que hacer persecución y guardia por tres días -incluyó pedido de nota al jefe de árbitros de FIBA Américas- para tener un mano a mano. “Ya he venido cinco o seis veces desde el 2002 y siempre el sentimiento es el mismo. No es fácil, llego con el compromiso de hacer el mejor trabajo”, larga.

-¿Te reconoce la gente?

-Definitivamente me reconoce. Es una situación bien difícil porque fue un Mundial y hay un pueblo detrás que siente que fue perjudicado por una decisión que yo no tomé. Es normal, y entiendo a la gente.

-¿Qué te dice?

-De todo.

-¿Te insulta?

-Sí. Mucho.

-¿En la cara?

-Sí, en mi cara.

-¿Y qué les decís?

-Nada, no contesto. Los árbitros tenemos que estar preparados...

-¿El que te habla bien?

-Le digo gracias, que bueno que me respete y trato de explicarle.

-¿Y nuestros jugadores que te han dicho?

-Nada. Es increíble. Hago una reverencia de admiración a esta generación de grandes profesionales. Ni siquiera hubo una broma.

-¿Volviste a ver el video de ese final?

-Nunca.

-¿Por qué? ¿Es duro?

-No. Nosotros aprendemos de esas situaciones pero mantengo mi posición. Es una jugada difícil, donde hay un contacto que pudo ser cobrado o no.

-Jaric reconoció haber empujado a Sconochini en esa jugada...

-No sé... Yo veo que Hugo entra y el jugador alto de Yugoslavia, con las manos arriba, lo encara con el cuerpo y hay contacto. Es una jugada de 50%. Pudo cobrarse como no...

-¿No ves foul de Jaric?

-Yo no veo ese foul.

-¿No era tu área?

-Sí, era mi área. Fue mi responsabilidad. Y decidí que no era un contacto suficiente como para pitar la falta. Toda es mi culpa si me equivoqué.

-Pitsilkas admite que se equivocó en el foul que cobra de Scola a Divac.

-(Se ríe) La recuerdo, como todo el partido. No quiero opinar, pero él admitió con humildad su error

-Pitsilkas dijo que no pudo dormir por una semana. ¿Vos?

-Recuerdo que era muy joven, tenía 24 años, pero me sentía bien para pitar esa final porque había hecho un gran torneo. No sé si dormí o no, pero sí fue un momento difícil...

-¿No te quedó cargo de conciencia?

-No, tengo la conciencia tranquila porque no lo veo como una equivocación. Yo siento que ese contacto no merecía ser pitado, no se podía definir la final con libres con lo que pude ver... No fue evidente.

-¿Qué le decís al país que te grita “nos robaste el título”?

-Nada, los entiendo, yo jugué y les he reclamado a árbitros. Pero sigo creyendo que yo no le robé nada a Argentina. En mi opinión, el partido se decidió ahí...

-¿Lo perdió Argentina?

-No exactamente...

-¿Lo decidió Pitsilkas?

-(Se ríe) Se decidió unos segundos antes...

Está clara su visión: no fui yo, fue él...