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Juan Espil se retiro a los 44 años

“El bombardero” bahiense se retiró del básquet anoche tras la derrota de Weber Bahía Estudiantes con Peñarol. Brilló en Atenas y en la selección.
Mirá los videos y recordalo jugando en Atenas.

El escolta bahiense Juan Espil, de 44 años de edad, quien se retiró anoche del básquetbol profesional afirmó que cuando "las cosas" se hacen bien se puede ir "tranquilo".


"Estoy bien físicamente pero ya es una decisión tomada. Estoy bien, cuando hacés las cosas bien, te vas tranquilo", dijo Espil tras la derrota de Weber Bahía Estudiantes ante Peñarol de Mar del Plata que selló la serie por los cuartos de final por 3 a 2 para el actual campeón argentino.
Espil, quien anotó tres puntos en su último encuentro, recibió la pelota del partido como regalo de manos del capitán de Peñarol, Leonardo Gutiérrez, en medio de una ovación por parte de ambas hinchadas.
"Les agradezco esta despedida, cuando volví dije que me trataron bien en todas las canchas. La verdad es que Peñarol es un equipazo y para ganarle debemos hacer un juego perfecto. Sólo aguantamos menos de un cuarto, nos ganaron bien", concluyó emocionado el ex jugador de Atenas y la selección argentina.
Una rica carrera
Espil fue un trotamundos del básquetbol y bien que podría seguir jugando si se tiene en cuenta que la mano le sigue caliente para encestar desde afuera.
Once equipos de Argentina, Italia y España gozaron del goleo desde afuera de Espil, quien nunca pudo estar en un juego Olímpico.
Si fue dos veces goleador de Argentina en Mundiales, fue campeón panamericano en Mar del Plata 95 y subcampeón Sudamericano en el 99, en su ciudad natal.
A nivel clubes fue campeón de la Liga Nacional con GEPU de San Luis en la temporada 92-93 y con de la Copa del Rey con el Tau Cerámica en 1998-99.

FICHA
Edad: 44
Fecha de nacimiento: 5 de enero de 1968
Lugar: Bahía Blanca, Argentina
Altura: 1.94m
Peso: ?
Club de formación: Liniers
Posición: Escolta
Experiencia: 23 años
Club anterior: Weber

Bahía




LOGROS DEPORTIVOS
Campeón de la Liga Nacional con GEPU en 1992-93.
Campeón de la Copa del Rey con Tau Cerámica en 1998-99.
Bronce en la Copa de las Américas de Puerto Rico de 1993 con Argentina.
Oro en los Juegos Panamericanos de 1995 con Argentina.
Plata en el Campeonato Sudamericano de Bahía Blanca de 1999 con Argentina.
Bronce en el Torneo de las Américas de San Juan de 1999 con Argentina
Superó los 650 tiros de tres puntos en la ACB.
Máximo goleador argentino de la historia en LNB (25.1 puntos)
Elegido mejor sexto hombre de la temporada 2010-11 de LNB.

PROMEDIOS


Aca la mejor jugada de su carrera.


Y sus 27 puntos con el Dream Team



Y un día decidió volver, dispuesto a retirarse en la misma competencia donde saltó a la fama. Quienes lo recordaban con nostalgia tuvieron que esperar a que se repusiera de una lesión, pero cuando lo hizo se encontraron con otra versión, el "tirador" le había dado lugar al "jugador". Arribó a Boca Juniors en 2008/09, continuó en Obras Sanitarias al año siguiente, hasta que finalmente regresó al club que lo vio "nacer" a nivel país. Jugó sus dos últimas temporadas en Estudiantes, tiempo suficiente para convertirse en el máximo anotador histórico del club.

Humilde como pocos entendió su rol, porque si bien mantenía su exquisito lanzamiento, ya no tenía el físico para jugar desde el inicio y pelear de igual a igual contra los más jóvenes. Pero tuvo la lucidez suficiente para captar el mensaje, y a sus 44 años esperó paciente en el banco el momento de entrar. Y cada vez que lo hizo respondió, sorprendió, y generó admiración de hinchas propios y ajenos, de compañeros de equipo y de colegas, nadie dejó de reconocerlo.

Cultor del perfil bajo, cuando más alejado de los flashes mejor. Pese a ello jamás dejó de atender a la prensa, nunca puso límites a las entrevistas, y aún enfermo y con dolor de garganta se prestó al diálogo, como hace unos meses atrás en Río Tercero, donde no pudo jugar producto de la gripe que lo aquejaba. Hombre de familia y cuidadoso de los suyos, sufrió la temprana ausencia de su padre Alberto, quien lo marcó en su vida, le inculcó su espíritu competitivo, de no conformarse y de ser cada día mejor... pero al mismo tiempo encontró en Mara a la persona que estuvo a su lado en cada momento, su fiel compañera, su esposa...

Cuando nos habíamos acostumbrado a su ausencia, y de verlo esporádicamente en otro continente, volvió a la Liga para regalar pinceladas de su basquet, totalmente intacto y al mismo tiempo más completo... Y cuando volvimos a habituarnos con su presencia en las canchas argentinas, llegó el momento de decir adiós...

Se retiró Juan Alberto Espil... se retiró el "caballero goleador".

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Que sepan los nacidos, y los que están por nacer... que nacimos para ganar y no para perder!